Según indicaron los reportes policiales, el menor estaba andando en su moto y fue perseguido por los efectivos. Allí un “disparo accidental” habría ocasionado la muerte del joven. Familiares y amigos se enfrentaron con la policía.
Tras la muerte del chico de 17 años, el jefe de Gobierno porteño sostuvo que es “una pérdida irreparable” y remarcó que investigarán a los involucrados. La familia del jugador de Barracas Central denuncia que fue un caso de “gatillo fácil”.