Desde este lunes habrá presencialidad plena en las escuelas porteñas, con el aula como burbuja y sin distanciamiento. Además, los alumnos volverán a tener faltas y deberán asistir de forma obligatoria.
El ministro de Salud de la Ciudad aseguró que se va «a controlar cada uno de esos lugares para tener garantía de seguridad, con control de la circulación de aire seguro, volumen de recambio de aire apropiado, tapabocas y distanciamiento».