«Estamos vigilando la zona. Ante cualquier actitud sospechosa daremos aviso a la policía», expresa la voz que ya suena en las plazas del distrito.
El Municipio de Moreno puso en marcha un nuevo sistema de prevención del delito en varias plazas céntricas del distrito. Desde esta semana, una voz emitida por altoparlantes instalados junto a las cámaras de seguridad advierte a los transeúntes que están siendo observados por el Centro de Operaciones y Monitoreo (COM).
El mensaje ya suena en la plaza Mariano Moreno (ubicada frente a la municipalidad), San Martín, la plaza de Las Carretas y la de la Libertad, en la localidad de Francisco Álvarez. En todas ellas, se repite una frase clara y directa: “Vecinos y vecinas, estamos vigilando la zona. Ante cualquier actitud sospechosa daremos aviso a la policía”.
La iniciativa apunta a disuadir a posibles delincuentes, reforzar la presencia estatal en el espacio público y brindar mayor tranquilidad a quienes circulan por las zonas más concurridas. Según explicaron desde la Secretaría de Seguridad, “surge como una idea concreta para anticiparse a los delitos”.
Desde el área detallaron que el sistema responde a la necesidad de hacer visible la vigilancia, más allá de las cámaras. “No todos notan la presencia de las cámaras. Esta voz es una forma de avisar, de advertir que hay vigilancia activa. La idea es que eso funcione como un factor disuasivo. Que lo piensen dos veces”, señalaron desde el Municipio de Moreno.
Aunque resulta complejo medir con exactitud el efecto inmediato del mensaje, los primeros indicadores sugieren una reacción visible entre los peatones. “Se nota en las caras de sorpresa. La gente se detiene, mira a su alrededor. Es una forma de marcar presencia y reforzar la seguridad en lugares de alta circulación”, indicaron.
El sistema forma parte de un plan integral que el Municipio viene ejecutando en materia de seguridad. Entre sus pilares se destacan el trabajo conjunto con la Policía Bonaerense y el Ministerio de Seguridad de la Provincia, los operativos de saturación barrial, el fortalecimiento de la Guardia Urbana Municipal —que patrulla a pie el centro de la ciudad— y el monitoreo permanente de cámaras de vigilancia.
Durante los operativos de saturación, los agentes recorren diferentes zonas del distrito, tanto a pie como en moto, realizan controles vehiculares y dialogan con vecinos. Las intervenciones se realizan en horarios y lugares variables, según los pedidos de los residentes y las planificaciones elaboradas con las fuerzas de seguridad provinciales.
Además, el plan municipal incluye acciones contra el narcomenudeo, con investigaciones que ya permitieron desarticular puntos de venta y demoler búnkers, y programas de acompañamiento a jóvenes que cometieron un primer delito, con el objetivo de ofrecerles alternativas educativas y laborales. “Abordamos la seguridad de forma integral: no solo desde lo represivo, sino también desde la inclusión y la recuperación del espacio público”, remarcaron.
Las obras de urbanización también integran esta estrategia de prevención. “Una calle iluminada y asfaltada es más segura que una oscura y de tierra. Todo suma a generar un entorno más cuidado”, concluyeron desde el Municipio.
La intención es ampliar el sistema de advertencia sonora a otras localidades del distrito, enfocándose especialmente en centros comerciales y plazas con gran circulación de personas.
