El gremio lanzó un fuerte comunicado contra el Banco Industrial asegurando que los préstamos dados a jubilados tienen tasas usurarias, que exceden el 250%.
La Asociación Bancaria Tucumán emitió un comunicado en el que repudió supuestas acciones implementadas por las autoridades del Banco Industrial (BIND).
El gremio local señaló en el texto que “el banco utiliza a los trabajadores, exigiéndoles que vendan préstamos y seguros sobrepasando los márgenes que los jubilados tienen a tasas usurarias, que exceden el 250%, y que con la primera cuota ya estarían recuperando el crédito”.
“Como los trabajadores bancarios se niegan a brindar esa prestación han sido separados, perseguidos y ‘apretados’ para que se retiren, bajo la complicidad de los gerentes de las sucursales de Tucumán”, manifestó.
La Bancaria anunció el estado de alerta en el sector e informó que ha denunciado ante la Secretaría de Trabajo estas medidas. A la vez, adelantó: “va a hacer la denuncia en el Anses porque alguien tiene que ponerle un límite a estos ‘kioscos’ que pretenden ser bancos y sólo están abiertos para aprovecharse de los jubilados. Tal vez en otros lugares son permitidos atropellos de este calibre, pero en Tucumán La Bancaria pone límites”.
El sindicato de trabajadores bancarios había realizado días atrás un paro y movilización a las dos sedes del BIND que funcionan en la city bancaria tucumana.En el comunicado, firmado por la secretaria General, Cecilia Sánchez Blas, y el secretario Adjunto, Bruno Sogno, el gremio apuntó a otra entidad financiera por posibles presiones: “el mismo camino con respecto a la persecución de trabajadores del banco Sucrédito”.
“El Banco Industrial utiliza a los trabajadores como ‘sicarios’ de los jubilados en Tucumán. Les exigen a los empleados que vendan préstamos y seguros, sobrepasando los márgenes que disponen los jubilados, y aplicándoles tasas usurarias que exceden el 250%. Con la primera cuota ya estarían recuperando el crédito. Como los trabajadores bancarios se niegan a brindar esa prestación, han sido separados, perseguidos y ‘apretados’ para que se retiren, bajo la complicidad de los gerentes de las sucursales de Tucumán”, denunciaron las autoridades de La Bancaria.
Ante ello La Bancaria de la provincia está en estado de alerta. Ya hizo denuncias a la Secretaría de Trabajo y las realizará en el ANSES porque alguien tiene que ponerle un límite a estos ‘kioscos’ que pretenden ser bancos, y sólo están abiertos para aprovecharse de los jubilados. Tal vez en otros lugares son permitidos atropellos de este calibre, pero en Tucumán La Bancaria pone límites”, indicaron.“El gremio también manifestó en un comunicado firmado por la secretaria general Cecilia Sánchez Blas y el secretario adjunto Bruno Sogno que estarían siguiendo el mismo camino “con respecto a la persecución de trabajadores del Banco Sucrédito. La Bancaria Seccional Tucumán no está dispuesta a tolerar estos abusos”, remarcaron.